top of page

Damaris Abarca - Tetra campeona chilena de Ajedrez


El ajedrez es un ejercicio constante de la vida pero en chiquitito, en 64 casillas. El ajedrez y la vida se tratan de constantemente tomar decisiones, asumir los errores o las equivocaciones, continuar si te equivocaste en algo, guardar las piezas y comenzar una nueva partida, trabajar con tu frustración, decirte cosas buenas, trabajar tus errores y aprender de ellos. También, se trata de ponerte en el lugar del otro y tratar de pensar lo qué piensa o siente esa persona.


Ponerte en el lugar del otro y tratar de pensar lo qué piensa o siente esa persona.

Soy ajedrecista de profesión. He tenido la oportunidad de participar en seis olimpiadas mundiales de ajedrez de manera consecutiva, he sido tetracampeona chilena de ajedrez en categoría adulta, multicampeona nacional infanto-juvenil y he estado en el podio del campeonato nacional de Chile por alrededor de 12 años. Además, desde el 2017 he asumido el rol de presidenta de la Asociación de Mujeres Ajedrecistas de Chile y desde 2018 fui electa como presidenta de la Federación Chilena de Ajedrez. Esta siendo la primera vez que una mujer chilena es presidente de una federación de ajedrez y por primera vez a nivel latinoamericano. Desde 2014 me convertí en miembro de la comisión de Mujeres de FIDE (Federación Mundial de Ajedrez) y como ajedrecista tengo los títulos de árbitro, instructora y Maestra, siendo este último un título que obtuve en en la olimpiada de Turquía del 2012.


Ser ajedrecista siempre fue una pasión, algo que me motivaba y que me hacía sentir bien. Le tengo un gran amor al ajedrez ya que es un deporte maravilloso, un patrimonio cultural y una herramienta que puede ayudar a las personas a potenciar habilidades positivas. Para llegar hasta este punto tener una red de apoyo fuerte ha sido clave. Ya sea la familia o las amigas, es importante relacionarse con gente que te mantenga conectada a la realidad.


Creo que uno tiene que ser muy consciente de sus potencialidades, estar en constante conocimiento de uno mismo y ser consciente de tanto las fortalezas, como de las debilidades. Soñar debería ser un derecho para los niños y las niñas ya que es algo muy bello que nos ayuda a potenciar nuestras habilidades y a construir una personalidad mucho más completa.


Soñar debería ser un derecho para los niños y las niñas

No me gusta la palabra “éxito” porque creo que no hay un secreto para alcanzarlo. Si tuviera la oportunidad de cambiar esta palabra, la cambiaría por “tranquilidad” o “ser feliz”, “alegre” o “estar satisfecha conmigo misma y con lo que hago”.


Uno de los más grandes cambios en mi vida sucedió cuando detectaron mi enfermedad, ya que tuve que hacer un cambio respecto a tomarme las cosas con más relajo. Fue entonces que me di cuenta que a veces nos complicamos por cosas pequeñas. Aprendí a ser más pausada con las exigencias conmigo, a tener una alimentación mucho más saludable y a ser más empática con los animales y con el medio ambiente. Otro gran cambio en mi vida fue cuando me convertí en madre. Esto me llevó a una etapa muy linda, a acompañar a alguien en su etapa de descubrir el mundo, de descubrirse a sí mismo, sus capacidades…el juego.


Creo mucho en la organización, y creo en comprometerme con las cosas que sé que puedo cumplir. También creo que es fundamental pedir ayuda, no solo cuando hay un desafío, sino también cuando uno está cansado o triste. Además, creo que la felicidad no puede ser egoísta. No basta con que solo uno se sienta dichoso o haya conseguido muchas cosas, la felicidad es una especie de derecho social y por ende debería ser colectiva.


Para cumplir tus metas, creo que debes ser muy auténtica y transparente. Tener la capacidad y el valor de decir las cosas que piensas. La vida no se trata de caer bien, de acomodarse a los espacios, de buscar encajar, sino de ser tú misma y entregar el mensaje que quieres. Por lo tanto, el primer gran consejo que doy es no perder esa autenticidad, ese ser tu misma.

Cuando te sientas cansada imaginate un mundo bello donde lo que más te apasiona sea una parte fundamental de este y entonces encuentra formas de ayudar a difundirlo. Para mí, el ajedrez es un patrimonio cultural de la humanidad, es deporte, tiene algo de ciencia, tiene algo de arte, tiene algo de juego y tiene algo de herramienta terapéutica y pedagógica. Creo que como el ajedrez para mí, eso que te apasiona a ti, puedes convertirlo en lo que quieras que sea.


Rodéate de personas positivas y generosas. De personas alegres y honestas. Rodéate de personas empáticas y comprensivas. De personas que sean sensibles, que sean tolerantes, abiertas de mente y libres. Rodéate de mujeres. Rodéate de niños y niñas, ya que es importante tener esta conexión. Rodéate de sabiduría, entonces rodéate y escucha a las personas que tienen mas años y quizas una visión diferente del mundo. Por último, rodéate de mujeres empoderadas, de mujeres que rompen esquemas y que dicen cosas rupturistas.

 

Escrita por: Laura Mejia

Editado por: Andrea Chaves


227 visualizaciones0 comentarios
bottom of page